Defensor del Pueblo:
- Advirtió que el crimen organizado siempre va a ser un peligro permanente para la niñez hondureña.
El Comisionado Nacional de los Derechos Humanos, Roberto Herrera Cáceres, aseguró hoy que la edad punible no es un elemento para justificar que Honduras tenga que separarse de convenios internacionales.
Indicó que las causas que inciden en la criminalidad y que obstaculizan el desarrollo sostenible es el problema que está afectando a la niñez.
En ese sentido, la edad punible no es un elemento que justifique que se contradigan parámetros internacionales del sistema americano de derechos humanos y que Honduras tenga que separarse de convenios internacionales, declaró.
El ombudsman hondureño es del criterio que la prevención es un elemento que necesita ser fortalecido ya que la edad punible, en sí misma, no es el problema.
“Es necesario examinar cómo prevenir y como controlar y sancionar severamente a esos delincuentes adultos que reclutan a la niñez, esas personas que abusan de los niños para llevarlos a la delincuencia”, precisó.
Agregó que los adultos que no son castigados, por sus actos delictivos, constituyen, con sus formas de vida, un modelo de atracción para la niñez que por falta de desarrollo y de madurez emocional toman esa misma dirección.
Centros de detención deben ser reordenados
Herrera Cáceres, recomendó reordenar los centros de detención de menores en conflicto con la ley ya que hay un desorden en su manejo.
Estos centros tienen que ser reordenados y ser atendidos, en su funcionamiento apropiado, en lugares adecuados y bajo el control del Estado, puntualizó.
Añadió que deben ser manejados por personas especializadas en temas de derechos humanos y con el conocimiento de todos los estándares nacionales e internacionales sobre el tratamiento de la niñez, que necesita un acompañamiento en el proceso de su maduración tanto física como emocional e intelectual.
Explicó que el objetivo de los centros de internamiento es la rehabilitación de esas personas y la reinserción dentro de la sociedad.
Otra propuesta, del titular del CONADEH, es la búsqueda de una política integral que permita mejorar sustancialmente el sistema penal de justicia juvenil y reforzar el Estado de derecho como parte del desarrollo en Honduras.
Advirtió que el crimen organizado siempre va a ser un peligro permanente para la niñez hondureña.
Sin embargo, lo que se necesita es incidir en los niños y jóvenes sobre cómo realizar actividades que no los acerquen al crimen organizado y no sean víctimas de su influencia y de su reclutamiento.
Además, se debe poner en evidencia que los estilos de vida de los delincuentes no es un modelo digno ni justificable ya que afectan tanto a sus familias como a las comunidades.
Se estima que la niñez en Honduras representa el 43% de los 8.7 millones de habitantes, lo que significa que es un sector importante de la población para el desarrollo del país.
Se estima que de los 3.7 millones de niños, aproximadamente el 29% la edad oscila entre los 12 y los 18 años, de estos hay alrededor de 574 privados de su libertad en los centros pedagógicos donde han sido detenidos por causas de infracciones luego de entrar en conflicto con la ley.
Fuente: Defensoria del Pueblo Honduras